- No digáis que agotado su tesoro
- de asuntos falta, enmudeció la lira.
- Podrá
no haber poetas; pero siempre
- habrá poesía.
- Mientras las ondas de la luz al beso
- palpiten encendidas:
- mientras el sol las desgarradas nubes
- de fuego y oro vista;
- mientras el aire en su regazo lleve
- perfumes y armonías;
- mientras
haya en el mundo primavera,
- ¡habrá poesía!
- Mientras a ciencia la ciencia a descubrir no alcance
- las fuentes de la vida
- y en el mar o en el cielo haya un abismo
- que al cálculo resista;
- mientras la humanidad, siempre avanzando,
- no sepa a do camina;
- mientras
haya un misterio para el hombre
- ¡habrá poesía!
- Mientras se sienta que se ríe el alma,
- sin que los labios rían;
- mientras se llore sin que el llanto acuda
- a nublar la pupila;
- mientras el corazón y la cabeza
- batallando prosigan;
- mientras
haya esperanzas y recuerdos,
- ¡habrá poesía!
- Mientras haya unos ojos que reflejen
- los ojos que los miran;
- mientras responda el labio suspirando
- al labio que suspira;
- mientras sentirse puedan en un beso
- dos almas confundidas;
- mientras
exista una mujer hermosa,
- ¡habrá poesía!
viernes, 15 de enero de 2016
Rima IV, Gustavo Adolfo Bécquer
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GUSTAVO ADOLFO BÉCQUER
ResponderEliminarGustavo Adolfo Bécquer nació el 17 de febrero de 1836 y falleció el 22 de diciembre de 1870.
Las obras más importantes de Bécquer son: Las Rimas, Historia de los templos de España, Cartas literarias a una mujer, Cartas desde mi celda, Libro de los gorriones y Obras completas.
Bécquer escribía poemas románticos como el siguiente
AMOR ETERNO
Podrá nublarse el sol eternamente;
Podrá secarse en un instante el mar;
Podrá romperse el eje de la tierra
Como un débil cristal.
¡todo sucederá! Podrá la muerte
Cubrirme con su fúnebre crespón;
Pero jamás en mí podrá apagarse
La llama de tu amor.